jueves, 11 de septiembre de 2014

11 de septiembre, dolor en Chile.



Hoy hace cuarenta y un años, en Chile se dio un golpe a la libertad, un golpe contra la democracia... el pueblo le pedía armas al presidente Allende que estaba dando pasos hacia el socialismo, porque se sentía que el capital, iba a dar un golpe de estado, dado que la clase obrera estaba comenzando a movilizarse y okupando todos los sectores críticos del país, organizándose en asambleas en sus puestos de trabajo y demás sectores, la revolución desde abajo y hacia la izquierda, había comenzado.

Allende no entendió que el poder tenía que bajar a los tajos okupados y desoyó a las fuerzas de izquierdas y los MMSS, decidiendo luchar desde arriba, utilizando los resortes del estado, lo que hizo que el golpe militar de Pinochet fuese más fácil, dado que la sociedad civil se despolitizó y abandonó las calles... la historia de la lucha obrera chilena durante el periodo de Allende y la contra de la derecha chilena y mundial, es un gran ejemplo de que la revolución y el cambio social, se tienen que realizar desde abajo y demuestra que si los partidos políticos de izquierdas llegan al poder, al segundo siguiente, tienen que entregar el poder al pueblo que los ha subido, porque como dijo Lenin, los parlamentos son un montón de mierda, donde los revolucionarios nos subimos solo para dar más publicidad a las luchas, porque si no, nos llenaremos de mierda.

Todo el poder al pueblo en las calles, tajos y demás enclaves sociales... hoy, que vivimos días históricos revolucionarios, todas las fuerzas políticas que pretendan representar a los y las trabajadoras, tienen que horrar por supuesto a Allende y su lucha, pero al mismo tiempo, no repetir su fallo, no olvidar que el último objetivo de llegar al poder de la izquierda, es arrebatar el poder al capital y entregárselo a una sociedad concienciada y en lucha.